lunes, 18 de enero de 2010

Un número del uno al diez

Escoge un número del 1 al 10, y escógelo bien, porque ese será el producto de todas estas semanas, y para algunos también las que vienen.

Enero tiene algo de entrañable que no tiene Junio, y que desde luego no tiene Septiembre.

Los de la biblioteca este año se nos subieron un poco a la parra, como Zara. Los de derecho han sido muy malitos. Mientras los de Zacut llegaban a la hora que querían, reservaban sus sitios a la hora de comer (la teoría oficial es que si pones un paquete de kleenex es como si hubieras meado para marcar tu territorio) y bailaban la conga (según ellos respetando escrupulosamente las reglas de silencio de la biblioteca), nosotros en Derecho, aunque este año no nos vimos asediados por goteras, sí que hemos tenido que soportar las miles de normas nuevas.

No sólo es que ahora te barran el sitio (del mismo modo que se barre una mesa para muerte por kiki encima de la misma) , es que además lo hacen dia si dia no, de modo que puedes dejar tus apuntes cuando te vas a comer, pero vuelves temeroso de tener que hacer el viajecito de la verguenza.
Tambien te hacen tanto shhhhhhhhh los bibliotecarios, que no podrías estudiar. Aunque solo hacen el shhhhhhhh en la zona en la que no se estudia, en la que se puede hablar.
Las que llevan tacones y nos alegran el día cuando las observamos caminar como patos se han ido.
Y nuestro némesis (el de Nacho y mío) sigue alli, mirándonos mal como siempre.


Pero lo peor, lo peor de todo, es que ayer por la tarde pusieron un cartel en el que prohibian besarse! si besar no hace ruido!! Cuando en Derecho nos atrevamos a hacer la conga silenciosa, al día siguiente saldrá un cartel de prohibido conga.
Se supone que lo han puesto porque hay una pareja que se da el lote en los pasillos estrechos en la biblioteca, donde Ross tiene su tesis, pero nunca les he visto.
Despues de anotaciones (segun me dijeron) bajo los carteles quejandose de esas prohibiciones, hoy ya no estaban
Yo no los he visto !!! :(

Y yo, sigo sin ir a Zacut. Si es que una se hace vieja, y las costumbres....

domingo, 17 de enero de 2010

La estética es una ascética y las personas son un coñazo

Malcomer, maldormir. Y cuando maldormir malsoñar.
La época del año en la que normalmente suelo estar más lúcida, este año es la excepción. A cambio, he estado más lúcida y menos árida en días de diario.

Por otra parte, este ascetismo tiene algo dulce; la sensación de darlo todo por la causa. Y sentir el cansancio y la desesperación parece significar que lo estás haciendo bien.

Me fastidia un poco la concentración las personas. Los seres humanos son un coñazo.

He dicho

sábado, 2 de enero de 2010

El color gris indistinguible de una historia como otras tantas

Es una historia bastante típica. Quizás no merezca ser contada

El y ella se conocen desde que naci. Desde pequeña, era el hombre de su vida. Era su cómplice, la enseñó a eludir la autoridad, le descubrió el amor a los clásicos, a la filosofía, a vivir aventuras. La típica historia de amor de respeto y admiración.
Aunque él siempre se mostraba demasiado orgulloso como para decirle que la quería, ella siempre estuvo segura de su amor.
El le decía a veces a ella que era especial, y ella sólo quería esforzarse por ser digna de la palabra "especial", por eso en su vida nunca hizo lo que hacían los demás.
Pero poco a poco, las cosas cambiaron. Y ya no eludían juntos la autoridad, ni dormían la siesta juntos, ni siquiera se sentaban los dos en el suelo a ver la tele. Su ojo verde y el otro azul se apagaron, y ya no la miraban ni a ella, ni a nadie.
Dijo que cuando creciera, cuando llegara el momento, hablarían, y le enseñería lo que él sabía. Pero cuando llegue ese momento será demasiado tarde.
El no quería mirarla, y ella creció muy rápido y ya no quiso encontrarle