Ahora ambas están liberadas, y no son pocas las veces que he visto en Vogue vestidos similares a los cuadros de Pollock, o estampados tipo Litchenstein, Mondrian... igual que mujeres vestidas (casi siempre por Galliano) al estilo goyesco. Es un gran ¿Por qué no? Y me encanta. Lo mejor es que después de transgredir las barreras, comienzan las ironías. Quien se vestiría ahora de los ochenta? permanente, colores flúor, hombreras. Aunque se revisitan ciertos toques ochenteros a menudo, nunca ha vuelto del todo.
Y aquí lo interesante. que a veces sí que vuelve. Son muchas ya las veces que veo a personas totalmente vestidas de los ochenta, y he pensado que es algo comparable a lo que sucede en el arte, poniendo el ejemplo de la monocromía.
Los primeros cuadros monocromos los hizo Málevich. Estos tenían un sentido, al igual que los de Klein y compañia. a medida que avanzaba el tiempo cada nueva sesión de cuadros de un solo color tenían un significado. La busqueda de la cuatridimensionalidad, el infinito, desesperanza, desmaterialización del arte... lo que fuera. Pero eso era la época moderna. en el modernismo se buscaba la experimentación, la novedad, pero ahora estamos en una época posmoderna (o estábamos...¿alguna sugerencia?) ya agotaron tanto la monocromía neoyorquina que ahora sólo nos queda la ironía. Hacer monocromos ahora no con intención de descubrir algo nuevo, sino revisitarlo sin inocencia. Si uno cuando ve un cuadro monocromo, y lo valora como antes, viéndolo como algo transgresor, juzgándolo seriamente, por lo visto queda un poco mal, cuando los artistas lo que les gusta es reírse de nosotros, meternos en un juego en el que debemos conocer las reglas. Todo el arte pop era un chiste, y un chiste sublime. Tanto usar iconos, un arte de la trivialidad... ¿¿admirar esa caja brillo que usas para lavar la ropa?? me parece algo maravilloso y me emociona.
En la moda es lo mismo. Sin embargo la moda está encadenada por lo cotidiano, al igual que el arte está encadenado por su estatus de "cosa muy especial". Uno no percibe la ironía de "disfrazarse", de vestirse de una época que no es la tuya, los ochenta es la que más se usa ahora para estas "comedias de similitud" que dicen los del mundo del arte. La mayoría de la gente te llamaría hortera, pero no se fijan, ni piensan, en tus intenciones al vestirte así. Porque para muchos, la moda no es algo relevante y es algo frívolo. Pero yo pienso que si la moda es algo frívolo, el arte también. Sólo se trata de un placer estético, o en todo caso de que te atraiga (para bien o para mal)